Paredes y techos impecables… ¡Sin pintar!
Es un truco para hacer una vez al año. Conseguirás que desaparezcan de las paredes esos roces, arañazos… que con el paso del tiempo hacen acto de presencia y que dan a la casa aspecto descuidado. Lo mismo sucede con los techos, donde el polvo y el humo del tabaco, si sois fumadores, dan un aspecto grisáceo.
Solución: Prepara en un cubo agua caliente, perborato (del que se usa para blanquear la ropa, que es baratísimo) y una pizca de detergente en gel para ropa. Moja en la mezcla una bayeta de microfibra, escurre y pásala por paredes y techos. Su aspecto mejorará visiblemente.